Los fondos de pensiones de los 22 mayores mercados del mundo alcanzaron en 2016 los 36,4 billones de dólares en activos, según el estudio Global Pension Assets Study, publicado por Willis Towers Watson, lo que representa un incremento del 4,3% en los últimos doce meses. Los activos totales de las pensiones suponen en la actualidad cerca del 62% del PIB de sus respectivos.
El informe también muestra que los activos de los fondos de pensiones, los que promueven las empresas para planificar la jubilación de sus empleados, han crecido una media anual del 3,8% (en dólares) durante los últimos cinco años, habiéndose producido el mayor crecimiento en China (20,3%)y el menor en Japón (-5,4%).
Mayor peso de activos alternativos
El estudio también ha detectado una caída en las asignaciones a la renta variable y fija durante los últimos veinte años, que se compensa con un incremento de las asignaciones a activos alternativos.
David Cienfuegos, director de Inversiones de Willis Towers Watson España, explica que “los fondos de pensiones mundiales han hecho algún progreso a pesar de tener el viento en contra en 2016. Esto se ha debido fundamentalmente a que los mercados de renta variable y las clases de activos alternativos han generado rentabilidades más allá de lo esperado. Mientras que las pensiones en muchos países tienen que lidiar con grandes flujos de salida, es alentador ver que el valor total de los activos ha subido en la mayoría de los países cubiertos por el estudio”.
Carteras cada vez más globalizadas
El estudio también confirma la continuidad de la tendencia hacia la globalización tal y como indica la reducción del sesgo local con una caída media del peso de la renta variable nacional en las carteras de fondos de pensiones del 69% en 1998 al 43% en 2016.
De los mercados analizados, Suiza, Canadá y Reino Unido tienen el porcentaje de asignación más baja en renta variable doméstica, mientras que los fondos estadounidenses fueron los más expuestos a la renta variable americana.
La gestión del riesgo continúa siendo el punto esencial en todos los fondos de pensiones globales. La estrategia principal para ello es la mayor diversificación, tal y como evidencia la tendencia al alza de asignaciones a activos alternativos y el cambio sostenido en los mercados de renta variable nacional.
“Un número mayor de fondos está utilizando técnicas de cobertura de riesgos para mitigar el efecto de un posible comportamiento adverso del mercado. Estas tendencias continuarán debido a los eventos geopolíticos y la incertidumbre existente en todas las regiones. Por tanto, la clave para el éxito estará en confrontar los riesgos globales, regionales y locales, permanecer a la vanguardia en lo relativo a cambios regulatorios y mejorar la gobernanza”, señala Cienfuegos.
“Este estudio sugiere que las tendencias a medio plazo para los fondos de pensiones continuarán con: el foco en la gestión del riesgo, la atención a la gobernanza, el creciente diseño de pensiones con modelos de aportación definida, la presión por captar talento de gestión, la simplificación de la cadena de valor y la integración de consideraciones ESG (inversión socialmente responsable). Cada uno de estos factores supone un gran reto, pero todos ellos juntos son la fórmula del éxito”, concluye.