Luxemburgo aglutina, como domicilio de distribución internacional, muchas de las propuestas de gestión de las entidades europeas e internacionales. Las gestoras registran después su producto luxemburgués en los distintos mercados para su distribución local. Y eso acaba de hacer la gestora del grupo asegurador Groupama, que acaba de registrar en España su fondo Total Return All Cap Europe, un fondo de renta variable europea que figura como compartimento dentro de su sicav luxemburguesa G Fund.
El G Fund – Total Return All Cap Europe es un fondo de alta convicción que puede invertir en empresas europeas de cualquier capitalización con un enfoque orientado al control del riesgo. Busca rentabilidades asimétricas y baja volatilidad para ofrecer proposiciones de valor tangibles.
Entre sus características, cuenta con exposición al dinamismo del mercado europeo de renta variable y trata de controlar la volatilidad global de la cartera. Su objetivo es amortiguar las fases de caídas de los mercados, participando al mismo tiempo de las subidas de los mismos mediante una gestión dinámica de la beta.
En un entorno de baja visibilidad, el fondo busca innovación usando un enfoque centrado en tres pilares y aplicando una gestión por fundamentales, activa e independiente de su índice de referencia con un disciplinado proceso de stock picking. El fondo está gestionado por Pierre-Alexis Dumont, gestor del fondo y director de las estrategias de Total Return en Groupama AM.
Tres motores
El gestor utiliza tres motores de rentabilidad. En primer lugar, la estrategia de bajo riesgo busca identificar compañías que combinen un bajo riesgo con buena visibilidad. El gestor mapea el riesgo de cada compañía dentro del universo de renta variable en Europa usando un modelo propio. Este paso se verá reforzado por un enfoque disciplinado para la valoración y construcción de la cartera.
En segundo lugar, la estrategia oportunista identifica temas que difieren de la estrategia de bajo riesgo para enfatizar el dinamismo del stock picking y captar las oportunidades de inversión. El gestor, por ejemplo, puede seleccionar situaciones de cambio (estrategia de restructuración) o situaciones especiales, como aquellas que ofrecen splits, fusiones o adquisiciones que generen valor.
Por último, cuenta con una estrategia de derivados, que optimiza el binomio rentabilidad/riesgo de la cartera. El gestor puede ajustar de manera dinámica la beta de la cartera para aprovecharse de las fases de recuperación tras una fuerte caída, o evitar un riego de pérdida extrema para el inversor.