A Vassili le cuesta organizarse para ahorrar; tiene una paga semanal, y algunas veces se la gasta entera mientras que otras semanas apenas la toca. A Vassili le ha ocurrido que en alguna ocasión ha comprado un videojuego y se ha encontrado con que no le quedaba nada de dinero ahorrado. Por eso, ha decidido pedirle ayuda a sus padres para que le administren el dinero mejor. Ahora Vassili siempre tiene dinero en su cuenta, porque sus padres son unos auténticos cracks en esto de la gestión financiera.
Con este ejemplo explican desde Self Bank la estrecha relación que hay entre pedir a unos padres que echen una mano para gestionar los ahorros de los niños y el funcionamiento de un fondo de inversión
Igual que en un momento dado podemos confiar en nuestros padres para que nos gestionen la paga, si queremos invertir en un fondo de inversión sabemos que detrás hay un equipo de profesionales que intentará sacarle el máximo partido
Eso sí, antes de invertir en un fondo de inversión, es importante entender cómo funciona. En primer lugar, habría que saber que está formado por las aportaciones de los distintos inversores, generando así el patrimonio de un fondo que se dividirá en participaciones. De este modo, cada partícipe tendrá un número de participaciones en función de la cantidad aportada.
Es la gestora la que decide en qué invertir el patrimonio. Escogerá unos u otros activos en función de la política y el objetivo de inversión del fondo, que se puede encontrar en los Documentos Legales del Fondo: DFI y en el informe semestral.
El precio diario del fondo es el valor liquidativo, que se calcula dividiendo el patrimonio total entre el número de participaciones; sirve para seguir la evolución del fondo. Es esencial vigilar siempre la evolución del fondo y valorar adecuadamente tanto la rentabilidad que nos da como el riesgo que se asume invirtiendo en él. La rentabilidad del fondo de inversión es la diferencia, positiva o negativa, entre el precio de compra de un determinado activo y el valor actual.
Por otro lado, el riesgo del fondo variará en función de los activos en los que invierta (renta variable, renta fija…) Los fondos se pueden clasificar de más a menos en función del nivel de riesgo: monetarios, RF corto plazo, RF largo plazo, fondos mixtos y renta variable.
A modo de resumen básico sobre qué es un fondo de inversión y cómo funciona, diremos que es un instrumento financiero gestionado por expertos, que su valor liquidativo varía todos los días y que se debe evaluar el perfil de riesgo de cada inversor antes de decantarnos por un tipo de fondo, ya que existen fondos de distintos niveles de riesgo. En definitiva, hay que tener claro que la rentabilidad de un fondo dependerá del mercado, pero también de la habilidad del gestor.
Entender este y otros términos económicos es uno de los objetivos del proyecto de educación financiera Pequeños Inversores, puesto en marcha por el banco digital Self Bank, junto a 25 gestoras de fondos con el que se busca desmitificar que las finanzas son complicadas y que hasta un niño es capaz de explicarlas.