En un contexto en el que las aguas están revueltas debido a la volatilidad generada por la guerra comercial, la incertidumbre del Brexit, la alarma que ha disparado la ralentización del crecimiento económico y las señales del fin del ciclo alcista, los expertos de Janus Henderson Investors se muestran infraponderados respecto a la renta variable, pero no extremadamente bajistas.
Según Nick Watson, gestor del equipo multiactivo, a lo largo de este año han aprovechado el marcado repunte de los activos de riesgo para recoger beneficios y adoptar un posicionamiento ligeramente infraponderado. “El repunte de la renta variable ha sido delimitado, dado que un pequeño universo de valores de crecimiento con calificaciones elevadas domina la rentabilidad del mercado estadounidense y, por tanto, la renta variable mundial”, señala Watson.
Asimismo, resaltan la dificultad de operar en un mercado tan marcado por la guerra comercial, ya que se trata de un acontecimiento sin precedentes. “Tratar de operar posiciones de renta variable únicamente en base en los tweets de Trump o los ajustes de China a su moneda es realmente complicado e impredecible”, explican.
Sin embargo, a pesar de que hayan adoptado posiciones infraponderadas, Watson señala que hay multitud de factores que le disuaden de adoptar un posicionamiento extremadamente bajista. “La confianza sigue siendo débil, por lo que si se produce un repunte, muchos inversores se verían perjudicados por sorpresa. La política monetaria es cada vez más acomodaticia, lo que suele ser favorable para la renta variable. Además, a los bancos centrales y a los políticos no les interesa provocar una corrección en los mercados”, aclara.
Asimismo, en vista de que las nubes de la recesión siguen relativamente lejanas y de que los bancos centrales flexibilizan sus políticas, desde Janus Henderson se reafirman en su decisión de no salir de la renta variable. “En general, la recogida de beneficios después de un repunte de más del 20% en la renta variable hasta la fecha nos parece una forma de proceder razonable, especialmente a medida que nos acercamos a una situación de rentabilidades más reducidas y más volatilidad de corto a medio plazo”, cocluye Watson.