Las perspectivas económicas para 2019 han cambiado totalmente respecto al año pasado. Nos encontramos, según Patrice Gautry, economista jefe de UBP, en un período de transición en el que hay preocupación por la ralentización del crecimiento mundial que se situará en el entorno del 3,5% este año.
Según Gautry, la ralentización global que ha tenido lugar en el último trimestre de 2008 y en el primero de 2019 dará paso a una estabilización en el segundo trimestre y a una recuperación en la segunda mitad del año. «Los fundamentales económicos son todavía sólidos tanto en creación de empleo como en confianza de los consumidores. Además, el sector manufacturero está viviendo su pequeño miniciclo y se espera que toque fondo en el segundo trimestre para recuperare en la segunda mitad del año», ha explicado Gautry durante un encuentro informativo.
La confianza empresarial ha caído y el principal detonante ha sido el descenso de las exportaciones. La ralentización de China así como la incertidumbre sobre la guerra comercial y unas condiciones financieras más estrictas explican este comportamiento.
Alemania e Italia, los puntos débiles de la eurozona
La economía europea ha sorprendido por su comportamiento negativo, excepto en el caso de España. En 2019 el crecimiento económico ha sido revisado a la baja desde el 1,5% al 1%. En este contexto, Alemania e Italia son los puntos más débiles de la región mientras que Francia presenta unas mejores perspectivas.
En opinión de Gautry, «el gap entre la produccion indistrial y el sentimiento empresarial es amplio, pero debería reducirse progresivamente ya que se espera cierto repunte en la industria liderado por el sector automovilístico».
Sin embargo, en Italia el potencial de crecimiento es estructuralmente bajo y las reformas no han permitido un rebote fuerte. Las perspectivas para Alemania son, sin embargo, de un recuperación después de haber tocado fondo. «Alemania se puede beneficiar de una mayor visibilidad por el Brexit, los fundamentales son buenos y el consumo fuerte excepto en el mercado inmobiliario», añade. Además, la coalición de Gobierno aumentará el gasto fiscal para proyectos de infraestructuras y medidas sociales, lo que podría tener un impacto positivo del 0,4% en el PIB. Entre los vientos de cara para Alemania, según señala Gautry, está el exceso de ahorro de Alemania. «Alemania se parece más a Japón que a Europa en su tasa de ahorro que es muy elevada, pero el problema es que se invierte localmente», afirma.
Respecto a España, UBP destaca que el ciclo económico del país está en una desaceleración suave desde 2018. Hasta ahora, la demanda doméstica ha mostrado resiliencia a la tensión política del país, pero el riesgo está en el regreso de esa tensión si el resultado de las próximas elecciones no es concluyente.
Estrategia de inversión
La estrategia de UBP para el contexto actual es conservadora y busca protección a través de activos como los bonos convertibles. Además, en renta fija prefieren crédito con grado de inversión. En renta variable, ven oportunidades or valoración en renta variable japonesa, aunque «hay poco crecimiento y está descontado». De los mercados emergentes, se muestran constructivos en China. «Es el más interesante de los mercados emergentes a medio plazo», explicaGautry.
En cuanto a Europa, sostiene que «está barata», pero tiene demasiados vientos de cara, por lo que se impone esperar a encontrar más oportunidades. Por sectores, son positivos en el financierao, energía y automóviles.