AXA IM también lo tiene claro: en 2019 no habrá recesión pero sí una desaceleración económica. Según Jaime Albella, director de ventas de AXA IM, “la variable macro más importante en la que nos fijamos es la curva de renta fija ya que ha sido capaz de prevenir ocho de las 11 recesiones, y de momento no se ha invertido”.
Sin embargo, los riesgos que motivan este cambio de dinámica en el crecimiento mundial siguen generando incertidumbres. “En Estados Unidos estamos viviendo el periodo más largo de cierre gubernamental y hay acontecimientos que también nos preocupan, como la guerra comercial o la bajada de estímulos de la Fed”, apunta el director de ventas.
«Vemos desaceleración y la curva se invertirá, pero lo hará a finales de este año y dará una señal a 24 meses, para 2021», resume Albella.
En Europa se nubla el escenario macro
Según los expertos de la entidad, Europa crecerá entre un 1,4% y un 1,2%. “Entre los detractores de crecimiento destacamos el impacto negativo del comercio exterior para este año, pero también encontramos otros como la caída del consumo o la inversión”, aclara Albella.
Dejando a un lado las razonables dudas sobre el proceso del Brexit, la principal preocupación para Albella en Europa es Italia. «Es el evento que mayor inquietud me provoca, sobre todo por el riesgo de contagio”, añade. En su opinión, el Brexit queda en un segundo plano ya que el escenario más probable será el de un soft Brexit. “Al ser un problema político es muy difícil prever qué pasará, pero descartamos otro referéndum ya que eso deslegitimaría al anterior”, matiza.
En cuanto a los mercados emergentes, el experto destaca que hay mucho ruido y que hay que tener el ojo puesto en el largo plazo: «A pesar de que siempre haya baches, si miramos dónde está el valor macro, vemos que sigue estando en los mercados emergente y en concreto en Asia”.
A pesar de una posible desaceleración global y de los riesgos que amenazan el crecimiento de la economía, Albella añade una nota positiva: “Hay desaceleración, pero el mundo va a mejor. Si nos fijamos en la mortalidad, la pobreza o el analfetismo vemos que están disminuyendo. En general vamos a seguir creciendo”.
Posición neutral en renta variable
De cara a los activos de las carteras, el director de ventas de AXA IM considera que lo más acertado será un cambio de posición en la renta variable: “Ahora estamos sobreponderados, pero creemos que adoptar una posición neutral será lo más acertado”.
La perspectiva de AXA IM gira entorno a que el crecimiento de los beneficios por acción alcance cerca de un 7% en el caso de la renta variable global. Sin embargo, la reducción de exceso de liquidez, los tipos a corto en EE.UU. al alza y el posible incremento de las primas de riesgo de la renta variable, impulsado por una mayor volatilidad y una confianza de los inversores más débil, son factores que pueden limitar la expansión de múltiplos, sostiene la entidad.
En cuanto a la renta fija, según Jaime Albella, “los bonos no han sido un buen refugio en el último año”. Sin embargo, la entidad deposita más confianza y valor en los bonos de Estados Unidos que en los del gobierno europeo, ya que se ven influidos por los problemas con los bancos italianos.
Dentro de las temáticas en las que invertir, AXA IM prefiere aquellas relacionadas con la longevidad y las empresas de pequeña capitalización, ya que considera que ambas tienen un alta capacidad de crecimiento.