La ralentización del crecimiento económico mundial será el escenario central en 2019. Según las previsiones de Schroders el PIB mundial se ralentizará hasta el 2,9% en 2019, convirtiendo a 2019 en el año más débil para el crecimiento global desde 2008. Además, la gestora espera una nueva ralentización hasta el 2,5% en 2020, principalmente impulsada por la moderación de la economía estadounidense.
En cuanto a la inflación, a pesar del menor crecimiento y del descenso de los precios del petróleo, su previsión ha aumentado hasta el 2,9% para 2019 debido a una mayor inflación en los mercados emergentes, donde la debilidad de las divisas está impulsando los precios de las importaciones. En 2020, prevén una moderación hasta el 2,7%, que reflejará la ralentización del crecimiento en 2019.
En concreto, Schroders prevé que el crecimiento económico en EE.UU. se sitúe en el 2,4% en 2019, a medida que decaiga el impulso de los recortes fiscales, aumenten los tipos de interés y se hagan patentes los efectos de una guerra comercial prolongada con China. De cara a 2020, esperan una nueva ralentización hasta el 1,3%.
En la zona Euro, esperan que el crecimiento se ralentice aún más desde el 1,9% registrado en 2018 hasta el 1,6% en 2019, debido a la prolongada guerra comercial entre EE.UU. y China.
En los mercados emergentes, Schroders señala que la debilidad prevista del dólar supone una ventaja, dado que impulsará el crecimiento y reducirá la inflación en los próximos dos años. En China, por ejemplo, se prevé que la ralentización a largo plazo se mantenga en 2020, pero esperan que el Gobierno local aplique medidas de estímulo para compensar el efecto de la guerra comercial entre EE.UU. y China en 2019.
Perspectivas de los tipos de interés de las principales economías
En opinión de Schroders, los tipos de interés en EE. UU. alcanzarán su nivel máximo en el 3% a mediados de 2019, pero otros bancos centrales seguirán endureciendo su política monetaria. El Banco Central Europeo (BCE), por su parte, previsiblemente pondrá fin a su programa
de expansión cuantitativa en enero de 2019, subiendo los tipos de refinanciación hasta el 1% a finales de 2020.