Los últimos datos muestran que la tasa de desempleo de las naciones más desarrolladas continúa cayendo. Una caída del desempleo generalmente es positiva para la economía, ya que aumenta la confianza, el gasto del consumidor y por lo tanto el crecimiento económico. Además, a medida que los mercados laborales “se estrechan”, los trabajadores se animan y empiezan a demandar un mayor salario. Según se desprende del último informe semanal de mercados de JP Morgan AM, se está empezando a ver un repunte en el ritmo del crecimiento de los salarios en EE.UU., en Reino Unido e incluso en Europa.
En este informe, JP Morgan AM destaca que el salario en las tres regiones está creciendo a su nivel más alto desde la crisis financiera. Estos salarios más altos deberían potenciar el gasto, pero podría también indicar una subida de la inflación. Desde la firma creen que el ritmo actual de crecimiento salarial debería implicar subidas graduales de la inflación.