La esperanza de vida de un estadounidense nacido en la actualidad alcanza 78,2 años, pero este año, más de 70.000 estadounidenses han cumplido 100 años. ¿Qué están haciendo que el estadounidense promedio no hace?
Para responder a la pregunta, la asociación Blue Zones, dedicada a ayudar a las personas a vivir más tiempo con mejor calidad de vida, en colaboración con National Geographic a identificar y estudiar a las personas más longevas del mundo. “Sabíamos que la mayoría de las respuestas corresponden al estilo de vida y al medio ambiente ya que, los expertos señalan que sólo alrededor del 20% de la esperanza de vida de una persona está determinado por sus genes”, explica Dan Buettner, fundador de Blue Zones. Se identificaron cinco zonas del mundo donde la esperanza de vida es más alta o donde hay mayor proporción de personas con más de 100 años:
- Región de Barbagia en Cerdeña: en esta zona montañosa del interior de Cerdeña se da la concentración más alta de hombres centenarios del mundo.
- Ikaria, Grecia: Esta isla del mar Egeo tenía una de las tasas de mortalidad más bajas del mundo y las tasas más bajas de demencia.
- Península de Nicoya, Costa Rica: Aquí se dan las tasas más bajas de mortalidad y la segunda mayor concentración de hombres centenarios.
- Adventistas del Séptimo Día: La mayor concentración de personas que profesan esta religión está en Loma Linda, California. Viven 10 años más que sus contemporáneos norteamericanos.
- Okinawa, Japón: Las mujeres mayores de 70 años son la población más longeva mundo.
Posteriormente, un equipo de investigadores médicos, antropólogos, demógrafos y epidemiólogos buscaron aspectos comunes del estilo de vida de estas personas repartidas por todo el planeta. Encontraron nueve:
1. Moverse naturalmente
La gente más longeva del mundo no corre maratones ni va al gimnasio. Por el contrario, viven en entornos que constantemente los empujan a moverse sin reparar en ello. Cultivan jardines y no disponen de máquinas que les hagan más fácil el trabajo en el hogar y en el campo.
2. Propósito vital
Los okinawenses lo llaman «Ikigai» y los nicoyanos lo llaman «plan de vida», porque ambos se traducen en «por qué me despierto por la mañana». Ser consciente de nuestro propósito vital añade hasta siete años de esperanza de vida.
3. Rutinas para aliviar el estrés
Incluso las personas más longevas del mundo experimentan estrés, lo que se asocia con las principales enfermedades relacionadas con el envejecimiento. Lo que las personas más duraderas del mundo tienen son rutinas para aliviar ese estrés. Los okinawenses se toman unos momentos cada día para recordar a sus antepasados, los adventistas rezan, los Ikarios duermen una siesta y los Sardinianos hacen la hora feliz.
4. Regla del 80%
«Hara hachi bu» – el mantra confuciano de Okinawa, de hace 2500 años afirma que hay que dejar de comer cuando el estómago está lleno al 80%. Ese 20%, que marca la diferencia entre no tener hambre y sentirse lleno, es también la diferencia entre perder peso o ganarlo. Las personas más longevas del mundo cenan poco y lo hacen pronto para no comer más el resto del día.
5. Más vegetales, menos carne
Frijoles, soja y lentejas, son la piedra angular de la mayoría de las dietas centenarias. La carne, principalmente carne de cerdo, se consume de media sólo cinco veces al mes.
6. Beber con moderación
A excepción de los adventistas, las personas más longevas beben alcohol de manera regular y moderada. Los bebedores moderados sobreviven a los que no beben. El truco es beber 1-2 vasos de vino al día en compañía de amigos y / o con la comida. Y no, no sirve dejar de beber durante la semana para luego tomarnos 14 copas el sábado por la noche.
7. Religión
Todos menos cinco de los 263 centenarios que entrevistaron pertenecían a una comunidad religiosa. Las investigaciones demuestran que asistir a servicios religiosos cuatro veces al mes añade entre 4 y 14 años de esperanza de vida.
8. La familia cerca
Los centenarios viven cerca de sus padres y abuelos, lo que además hace disminuir la tasa de enfermedad y de mortalidad de los niños de la familia. Se comprometen a acompañar a sus mayores e invierten tiempo y amor en sus propios hijos para que cuiden de ellos cuando llegue el momento.
9. Círculos sociales
La gente más longeva del mundo elige – o nace en – círculos sociales que apoyan comportamientos saludables, los okinawenses crearon «moais» – grupos de cinco amigos que se comprometen durante toda la vida. Hay estudios que demuestran que fumar, la obesidad, la felicidad, e incluso la soledad son contagiosas, por lo tanto, las redes sociales de personas longevas han beneficiado sus hábitos de salud.
El estudio concluye que, si bien alcanzar los 100 años de vida tiene un componente genético, la mayoría de nosotros podemos mejorar nuestros hábitos y añadir entre 10 y 12 años de esperanza de vida adoptando el estilo de vida de las personas más longevas del planeta. Para calcular su esperanza de vida en función de la zona del mundo en la que vida, pinche aquí.