Se cumplen cinco años desde que Bestinver cambiara a su equipo de gestión y Beltrán de la Lastra se uniera a la dirección de la firma, un periodo de referencia muy usado en el mundo de la inversión para seleccionar fondos y también apropiado para hacer balance. En este marco, la firma celebró ayer en Madrid su XVIII Conferencia Anual de Inversores, que estuvo centrada en explicar su filosofía y proceso de inversión, y en reflexionar sobre este último lustro.
“Tras el difícil momento de 2014, donde les pedimos a todos ustedes que confiaran en nosotros, a día de hoy, podemos reafirmarnos en la gestora independiente y en el líder del mercado que somos gracias a los 52.000 inversores y los 6.2000 millones de euros bajo gestión que hemos alcanzado”, señaló Gustavo Trillo, director comercial de Bestinver, para abrir esta conferencia.
Su primer mensaje para el auditorio fue repasar la rentabilidad acumulada en el fondo internacional, que se sitúa en 47,2% desde octubre de 2014 hasta abril de 2019, para ejemplificar cómo la puesta por la renta variable a largo plazo sigue siendo una buena oportunidad. “Creemos que los últimos cinco años han sido muy satisfactorios porque hemos logrado una rentabilidad media anualizada del 9%”, añadió.
La firma quiso recordar que su filosofía de inversión guía cada uno de sus decisiones y que siguen defendiendo la inversión en renta variable con una visión a largo plazo, mientras que la renta fija, que por primera vez ocupó un espacio propio en estas conferencias anuales, es “una opción para invertir a corto plazo o para aquellos que no sean capaces de resistir el riesgo de la renta variable”, matizó Beltrán de la Lastra, presidente de Bestinver, quien recogió el testigo para ahondar sobre cómo invierte la firma y cuáles considera que son ahora los principales riesgos del mercado.
Sobre esto último, señaló cuatro temas que considera importante: los riesgos políticos, una posible recesión, la inflación y la liquidez. “El ahorro puede convivir con los riesgos políticos, de liquidez o una recesión, pero la inflación mata al ahorro. Nunca ha habido un momento donde estuviera más ausente, pero creemos que haya desaparecido; sino que volverá y lo hará con fuerza. Por eso creemos que una solución, aunque suene incómoda, será invertir en activos reales para nosotros en renta variable o en activos inmobiliarios. En mi opinión, la renta variable es superior a la inversión inmobiliaria porque ofrece rendimientos mayores y porque éste último es un activo estructuralmente carísimo en España”, señaló.
También quiso llamar la atención sobre la liquidez, uno de los riesgos que más le preocupan y que, sin embargo, considera que se está hablando poco. Según defendió, “es el mayor riesgo latente que hay a corto plazo. Estamos viendo momentos donde hay una pérdida momentánea de la liquidez del mercado y eso es un riesgo muy significativo, que tenemos muy en cuenta a la hora de construir nuestras carteras. La percepción de la liquidez es muy distinta a la realidad que existe”. Además, hizo hincapié en el gran endeudamiento en que se han situado los estados.
Respecto a los riesgos políticos y de una posible recesión, De la Lastra apuntó que son dos temas que siempre están sobre la mesa. “Nos preocupan más en la medida que se habla más de ellos”, advirtió y consideró que el riesgo real es tener puesto el foco en este tipo de eventos y que de ello dependa “cómo se pone el dinero a trabajar”, mencionó reforzando la visión de la gestora de largo plazo. En el ámbito político, el mayor riesgo que identificó afecta al euro: “El Brexit es un caos que solo va a más y cuando uno cree que no puede ser más caótico, lo es. Me preocupa más que se produzca una crisis del euro y lo que supondría con la inflación, por ello creo que debemos estar preparados”
Propuesta de carteras robustas
Frente a este escenario, De la Lastra insistió que ellos marcan la diferencia gracias a su filosofía y proceso de inversión que, además, “está dotado de los recursos necesarios” para que realmente sea eficiente. En este sentido, desde la firma quiso destacar que su propuesta de valor se basa en construir carteras robustas.
“Buscamos las mejores rentabilidades a través de la renta variable basándonos en tres pilares: el análisis de fundamentales, la gestión del riesgo y nuestra vocación a largo. Filosofía que aterrizamos en un proceso de inversión en que analizamos esos fundamentales, definimos nuestro universo, buscamos las valoraciones más atractivas y construimos la cartera, apoyados en un equipo con más de 25 años de experiencia y unos 25 años de edad”, resumió De la Lastra. Uno de los aspectos que el presidente de Bestinver quiso dejar claro es que, durante este tiempo, ha cometido errores e advirtió a los inversores a que desconfíen de “aquellos que no reconozcan cometerlos” porque “es algo intrínseco a la condición de esta profesión”.
Por último, una de las novedades que se vió durante la conferencia de este año es que la renta fija tuvo un lugar propio y Eduardo Roque, responsable de renta fija en Bestinver, fue el encargo de explicar el papel que juega este tipo de activo para la gestora. “Hablar de renta fija en una casa como Bestinver, que es renta variable, es un poco raro, pero tiene sentido si se piensa en su horizonte temporal: invertir a corto plazo. Aconsejamos a los clientes invertir en renta variable, pero eso no quiere decir que haya que renunciar a la rentabilidad que podamos obtener de la renta fija”, afirmó.