Entre las novedades normativas de la última semana destaca el paquete legislativo que ha publicado la Comisión Europea y que está destinado a revisar la directiva sobre gestores de fondos de inversión alternativos (AIFMD, por las siglas en inglés) y el reglamento sobre los fondos de inversión a largo plazo europeos (FILPE).
Tras las consultas realizadas hace un año, la Comisión Europea ha presentado recomendaciones concretas de cambios, que serán examinadas en las próximas semanas por el Parlamento Europeo y el Consejo de la UE, antes de que puedan comenzar las negociaciones a tres bandas.
Desde la Asociación Luxemburguesa de la Industria de Fondos (Alfi, por sus siglas en inglés), explican que la propuesta de revisión de AIFMD incluye: introducir nuevos requisitos para los GFIA de los FIAs que realicen actividades de concesión de préstamos; garantizar la disponibilidad de instrumentos de gestión de la liquidez en circunstancias excepcionales;
detallar más los requisitos de fondo (recursos humanos y técnicos) y establecer algunos nuevos requisitos en caso de delegación (cuando los gestores delegan más funciones de gestión de cartera o de riesgo fuera de la UE de las que conservan, notificaciones anuales de las ANC a la AEVM sobre los acuerdos de delegación con entidades de terceros países, revisión por pares de la aplicación del régimen de delegación); y, por último, posponer el concepto de pasaporte de depositario a una fase posterior.
La Asociación Europea de Fondos y Gestión de Activos (Efama, por su siglas en inglés) valora positivamente estas propuestas. Sobre la revisión del marco regulador de los gestores de fondos de inversión alternativos comenta que contribuirán al avance de la Unión del Mercado de Capitales. “El ajuste de un marco exitoso es una ciencia en sí misma y requiere un juicio medido y una aportación basada en datos de fuentes relevantes. Si los colegisladores consiguen mantener el equilibrio adecuado, la AIFMD revisada proporcionará a los gestores de activos un marco perfeccionado a prueba de futuro para nuestro sector y para los inversores”, ha explicado Tanguy van de Werve, director general de Efama.
Dado que los fondos UCITS están sujetos a estrictas normas de producto, Efama cuestiona la utilidad de introducir un régimen de información para ellos. Las normas de producto existentes incluyen restricciones sobre los activos elegibles, el endeudamiento financiero y la negociación de derivados, todo lo cual limita los riesgos sistémicos que estos fondos pueden representar para el sistema financiero. Además, la asociación sigue siendo cautelosa en relación con algunos de los cambios propuestos en los requisitos de delegación y externalización y las consecuencias no deseadas que dichos cambios pueden tener en un régimen de delegación probado y comprobado que funciona en beneficio de los inversores.
“En general, los instrumentos de gestión de la liquidez deberían evolucionar en consonancia con las prácticas del mercado. Advertimos contra la introducción de normas demasiado prescriptivas. La activación de estas herramientas debe quedar a discreción del gestor. Depende de las características individuales de los fondos que gestionan”, ha afirmado Federico Cupelli, director adjunto de Política Reguladora de Efama.
Hacer más accesibles los FILPE
Respecto a los cambios que se proponen para los fondos de inversión a largo plazo europeos (FILPE), desde Alfin apuntan que los cambios se centran, principalmente, en: ampliar el ámbito de los activos e inversiones admisibles; permitir una mayor flexibilidad en las normas de los fondos, incluidas las estrategias de los fondos de inversión. Además, se busca reducir los obstáculos injustificados que impiden a los inversores minoristas acceder a los FILPE. Para ello se propone eliminar el umbral mínimo de inversión de 10.000 euros; eliminar los requisitos de umbral máximo agregado del 10%; y alinear la evaluación de la idoneidad con las normas de la MiFID II. “Al mismo tiempo, se flexibilizan determinadas normas de los fondos FILPE que se distribuyen únicamente a los inversores profesionales”, destacan desde Alfi.
En opinión de Efama, el marco revisado tiene el potencial de transformar los FILPE en un producto de elección para los inversores europeos y de convertirse en una piedra angular de la Unión de Mercados de Capitales.
“La relajación de estas restricciones y la posibilidad de que los inversores minoristas comprometan cantidades menores en un FILPE aumentará su contribución a la financiación de la economía real. La reducción de las restricciones a la tenencia de activos reales y el aumento de los umbrales de capitalización bursátil también son bienvenidos, ya que permitirán a los gestores incluir en el FILPE a más empresas y a proyectos más pequeños pero potencialmente valiosos”, señalan desde Efama.
Sin embargo, advierten de que algunas partes de la propuesta deberán ser examinadas. “Efama aprecia los esfuerzos de la Comisión Europea por responder a las necesidades de los inversores, al considerar soluciones que permiten reembolsos más frecuentes. Sin embargo, la asociación cree que se necesitan más aclaraciones, especialmente en lo que respecta al mecanismo de ventanilla de liquidez propuesto y si cumplirá su objetivo tal como está”, han indicado en un comunicado.
Punto de acceso único europeo
Desde finReg360 apunta un tercer elemento que permitirá avanzar hacia la Unión del Mercado de Capitales: el punto de acceso único europeo (PAUE o ESAP, por las siglas en inglés). Según explican los expertos de la firma, “pretende ser el canal para la información pública relacionada con la sostenibilidad de las empresas financieras y sus productos de inversión. Con él, se busca dar mayor visibilidad a las empresas ante los inversores, por lo que es especialmente importante para las pymes”. Además, destacan que el PAUE también contendrá información relacionada con la sostenibilidad publicada por el resto de empresas, lo que apoyará los objetivos del Pacto Verde Europeo.
En opinión de Efama será una herramienta crucial para abordar la limitada disponibilidad y la naturaleza dispersa de la información financiera y de las entidades relacionadas con la sostenibilidad a nivel de la UE. “La consolidación de la información financiera y ESG de las empresas divulgada públicamente en un único lugar contribuiría en gran medida a la integración del mercado de capitales de la UE y ahorraría tiempo y recursos a los inversores, especialmente al darles libre acceso a esos datos en un formato estructurado, comparable y legible por máquina”, ha destacado Van de Werve.
Según advierten desde la organización, en la actualidad, los inversores se enfrentan a importantes dificultades para acceder y utilizar la información divulgada en los 37 marcos legislativos incluidos en el ámbito de aplicación propuesto por el PAES. Sólo el 5% de las obligaciones de información en el ámbito financiero son efectivamente legibles de forma sistemática.