En coherencia con su objetivo de situar la sostenibilidad en el centro de su estrategia de inversión, Mercer se ha comprometido a lograr el objetivo de alcanzar cero emisiones netas de carbono para 2050 para todos sus clientes con gestión discrecional de carteras en Reino Unido, Europa y Asia, así como para la mayoría de sus fondos multiclientes y multiactivos radicados en Irlanda. En total, la cifra representa unos 36.700 millones de euros en activos gestionados durante 2020.
En 2030 Mercer espera haber reducido un 45% las emisiones de carbono relacionadas con la cartera de inversión, en referencia a los niveles de 2019. Este compromiso está alineado con el objetivo de limitar el calentamiento global a 1,5 grados centígrados planteado por el Acuerdo de París. «Estamos comprometidos con inversiones que apuestan por un escenario que limita el aumento de temperaturas en 1,5 grados”, explica Cristina San Juan, socia y directora de Mercer Investments.
“Además, existe una creciente demanda, tanto por parte de los responsables de planes de pensiones como del conjunto de los clientes, en favor de las inversiones sostenibles que contengan un enfoque riguroso y medible en cambio climático. Gracias al trabajo que llevamos haciendo en todas las clases de activos, estamos convencidos de que podremos reducir las emisiones relacionadas con nuestros fondos a la vez que seremos capaces de cumplir con nuestros objetivos de inversión», agrega.
Bajo el Plan de Transición Climática de Mercer, la compañía trabajará en estrecha colaboración con sus responsables de inversiones para identificar y gestionar un plan por etapas de reducción de emisiones, supervisar las asignaciones de carteras a inversiones sostenibles y favorecer una mayor capacidad de transición en todos los fondos.
“Utilizando la herramienta Analytics for Climate Transition (ACT) creada por Mercer en 2020, ayudamos a posicionar mejor las carteras hacia las inversiones sostenibles. Con ella identificamos las inversiones que involucran mayores o menores emisiones de carbono para establecer el nivel de riesgo de cada cartera y comprometernos con aquellas compañías que más contribuyen a lograr nuestro objetivo de cero emisiones netas», apunta Cristina San Juan.
Mercer medirá de forma anual el grado de cumplimiento para garantizar en última instancia el cumplimiento de este objetivo.