Standard Life Investments, la rama de gestión de activos del grupo Standard Life fundada en 1998, sigue trabajando a fondo en su expansión internacional. En palabras de Asa Norrie, responsable de Desarrollo de Negocio en Europa de la gestora, “el impulso global continúa”, de forma que la entidad ya tiene tentáculos en el continente americano, asiático y australiano, si bien el negocio europeo está a un nivel más avanzado y su expansión está dando “otro paso más”.
En una entrevista con Funds Society en el marco de su evento anual con periodistas en su sede central de Edimburgo, Norrie explica cuáles son las regiones europeas en las que ha puesto su foco. “En general tenemos una cuota de mercado menor al 1% en muchas regiones. Si queremos llegar al 1%-2% tenemos la necesidad de realizar una planificación estratégica”, afirma.
Donde la gestora tiene mayor fuerza es en Alemania (donde tiene alrededor de 11 personas dedicadas a la región, tras abrir una oficina en Fráncfort), pues es el único mercado donde cuenta con la presencia de la firma aseguradora Standard Life, y eso condiciona su negocio, y al mismo tiempo obliga a modificar su estrategia y buscar diferentes soluciones a la hora de aproximarse a otros mercados en los que no cuenta con ese apoyo.
Los países nórdicos, desde Estocolmo, constituyen otro de los grandes focos de crecimiento, además de Suiza y Mónico y el Benelux y Francia (sin olvidar a Irlanda). “Tenemos una oficia para el negocio de real estate en París, gente en Ámsterdam y Bruselas… y profesionales en los diferentes centros financieros que principalmente dan soporte al negocio institucional”, explica.
En mercados como Holanda, Alemania y Suiza, el foco está puesto en los grandes inversores institucionales, que principalmente tienen grandes volúmenes invertidos en renta fija; no hay que perder de vista que de los 323.600 millones de euros bajo gestión de Standard Life Investments, casi dos tercios (206.800 millones de euros) están en manos de clientes institucionales, y el resto (116.900 millones, con datos de la entidad) pertenecen al minorista.
Creciendo en Iberia
El quinto gran foco de su estrategia europea es el sur de Europa, con los mercados de Italia e Iberia en su punto de mira, y con multinacionales y también fondos de pensiones como grandes clientes, si bien su negocio se materializa, más que a través de mandatos (como ocurre en otros mercados), en muchos casos a través de fondos. Norrie, que explica que a menudo en los diferentes mercados han de encontrar soluciones diferentes para necesidades distintas de sus clientes, comenta cómo en España, donde el 70% de los activos están invertidos en deuda, los selectores de fondos pasan la mayoría de su tiempo en encontrar soluciones dentro de la renta fija… y es ahí donde están trabajando, con soluciones en el ámbito del retorno absoluto (dentro de la renta fija), por ejemplo, o generando alfa en el segmento de crédito (algo que suscita un gran interés en todo el continente).
En general, debido a su perfil –en muchos casos son esquemas de pensiones-, muchos clientes institucionales de la gestora tienen grandes posiciones en renta fija y la entidad trata de buscar diferentes formas de gestionar el activo, diferentes soluciones, que puedan generar valor en un momento determinado. Norrie destaca, por ejemplo, las capacidades y credenciales de la casa en crédito. “Vemos gran apetito por soluciones innovadoras en crédito dentro de la renta fija”, explica, y en general, por soluciones de deuda capaces de generar mayor alfa, puesto que los inversores valoran la seguridad y no han dado el salto esperado a los activos de renta variable (con algunas excepciones, como el caso de los clientes nórdicos, con mayor apetito por la renta variable global).
No solo GARS…
Porque, explica Norrie, Standard Life Investments es mucho más que sus soluciones multiactivo dentro de su sicav GARS, con gran éxito en mercados como el español en los últimos años. Y un producto por el que la entidad es conocida. “Llegamos con el producto adecuado en el momento adecuado”, explica hablando de España, cuando este producto captó gran atención de los clientes en un entorno en el que los fondos garantizados dejaban de ser atractivos. Pero ahora la gestora sigue comprometida en ofrecer “la próxima evolución” de productos que pueda encajar al inversor europeo. Entre las ideas en su pipeline, destaca soluciones en el espacio de retorno absoluto; en renta variable, en el espacio de la obtención de rentas; también en el de la inversión responsable, combinando con la deuda emergente; o nuevas soluciones en real estate, que aseguren rentas. Hace unos días anunció el lanzamiento de un nuevo fondo multiactivo.
De hecho, Standard Life Investments está diversificando sus soluciones: en el negocio europeo, el 40% de sus activos están en multiactivos, pero el 25% ya está en renta variable y el 29% en renta fija, y el 5% en activos inmobiliarios. “Es importante ofrecer muchas alternativas en un mundo de bajos números”, explica la experta. Y así han puesto título al evento de prensa de este año en Edimburgo. “Hemos incrementado las soluciones en todas las clases de activos, no solo somos GARS. Somos más fuertes en renta fija, en segmentos como el crédito, y también en renta variable”. Norrie explica cómo siempre buscan nutrir su oferta de soluciones innovadoras, en todos los activos, y que a veces la innovación ha de ir más allá de los productos tradicionales “Plain Vanilla” debido al reto que existe para encontrar retornos en un mundo de bajos números.
En su opinión, habrá gestores pasivos y activos, y los que están en el medio son los que sufrirán. Su gestora en el lado de la gestión activa y la generación de verdadero alfa, sin restricciones, en los distintos activos (crédito, small caps, renta variable europea…). “No pretendemos competir en el mismo espacio con las gestoras locales de cada mercado que son nuestros socios, sino aportarles el valor de nuestra gestión”, añade. Una gestión que se basa en ofrecer alfa.
Brexit y MiFID II: en el horizonte
MiFID II es un gran reto en Europa y la gestora, que ya cuenta con la experiencia de la RDR en Reino Unido, no tiene miedo a adaptarse. “La regulación cambiará todo (a los consumidores, los costes, la transparencia…), cambiará el futuro para bien. Nos encontramos razonablemente cómodos dada la falta de claridad de la normativa”, añade Norrie. La entidad ya ha lanzado clases limpias de sus fondos en algunas jurisdicciones y además cuenta con la experiencia vivida en Reino Unido con la RDR, cuando ayudaron a los asesores con nuevas soluciones y les ofrecieron una educación interactiva, algo que extenderán en el futuro a sus clientes europeos cuando el escenario se iguale tras la implementación de MiFID II.
Sobre los retos del Brexit, asegura que la implementación llevará años, si bien reconoce que habrá implicaciones a muchos niveles, para los empleados, los inversores… Pero no está preocupada: “Consideraremos todos los aspectos desde una perspectiva práctica”. En su caso, además, cuentan con la ventaja de tener bien establecido su rango de fondos en Luxemburgo, que los inversores siguen comprando con fuerza.