“Brexit significa Brexit”. Con estas palabras, la primera ministra británica Theresa May ha convocado elecciones generales en Reino Unido para el próximo 8 de junio en un discurso duro que deja entrever que esto no es un paso atrás.
May adelanta los comicios para disipar cualquier duda o resistencia sobre la labor que tiene por delante. De hecho, el partido conservador que lidera disfruta de una ventaja de 19 puntos en las encuestas sobre sus rivales más cercanos, lo que parece una clara oportunidad para que su partido obtenga una cómoda mayoría.
“En este momento de gran importancia nacional”, dijo en referencia a las incipientes negociaciones con la Unión Europea sobre el proceso de Brexit, “debería haber unidad aquí en el Parlamento, pero hay división. Nuestros rivales se equivocan. Subestiman nuestra determinación para hacer el trabajo. Debilitan nuestra posición negociadora en Europa. Si no celebramos elecciones ahora, su juego político continuará”, dijo en su discurso la primera ministra británica.
«Después de la votación de los presupuestos, vimos una pequeña rebelión de los conservadores en el Parlamento que fue suficiente para hacer que el gobierno cambiase su propuesta sobre los impuestos para los trabajadores por cuenta propia. Creo que May se ha dado cuenta de que esto podría suceder de nuevo durante las negociaciones con la UE”, dice Keith Wade, economista jefe y analista de Schroders. Con estas nuevas elecciones, la primera ministra busca fortalecer su posición.
“Un Brexit suave parece ahora más probable”, sentencia Wade.
Convocatoria inesperada
Eso sí, May corre el riesgo de que sufrir una derrota inesperada en las urnas que mande el mensaje de dar marcha atrás en la salida de la UE. A fin de cuentas, el electorado votó por David Cameron y ella llegó al 10 de Downing Street tras la dimisión del líder tory. Sin embargo, hay que tener en cuenta que una victoria holgada podrían darle más libertad de acción de cara a las negociaciones con la Unión Europea.
“Nadie se esperaba esto. Y menos cuando el propio gobierno descartó unas elecciones antes de 2020 hace tan solo cuatro semanas. Pero Theresa May ha encontrado una oportunidad para consolidar su mandato ante las negociaciones del Brexit. La elección debería entregar a Theresa May un mandato mucho mayor para mantenerse frente a la línea dura”, cree Luke Bartholomew, gestor en Aberdeen Asset Management.
Y es que, como dice Peter Hensman, del equipo de Real Return de Newton, filial de BNY Mellon, “muchos verán esto como un segundo referéndum sobre la adhesión a la UE y en las próximas semanas veremos si la convocatoria juega a favor de fortalecer la posición del gobierno o aumenta la incertidumbre”.
Reacción del mercado
La libra sube a máximo de 2 meses y medio y se cambia a 1,2632 dólares esta mañana, aunque la reacción inicial del mercado ha sido débil. Es probable que los inversores necesiten algún tiempo para digerir los efectos de las elecciones durante los próximos días.
De hecho, cree Manuel Ortiz-Olave, jefe de analistas de Monex Europe, unas nuevas elecciones podrían ser positivas para la libra ya que se daría una transferencia de poder de negociación desde Downing Street al Parlamento británico, lo que podría ayudar a disipar las preocupaciones relacionadas sobre el futuro de las negociaciones del Brexit.
El FTSE 100, que se mueve en dirección contraria a la libra debido al grado de comercio internacional de las empresas del índice, está cayendo con fuerza esta mañana, habiendo perdido más de un 1.5%, en lo que va de día.
“Debido a que los mercados ya han descontado un Brexit duro, unas elecciones anticipadas podrían mejorar las expectativas de un Brexit blando y, consecuentemente, el panorama económico del Reino Unido”, apunta Ortiz-Olave.
«La libra repuntó con la noticia, haciendo caer el valor en libras esterlinas de los ingresos en el extranjero y por tanto la renta variable de Reino Unido. El aumento de la divisa parece estar impulsado por las expectativas de que con una mayoría más amplia May ya no será rehén de quienes abogan por un Brexit duro dentro de su partido”, afirma Toby Nangle, responsable de multiactivos en la región de EMEA de Columbia Threadneedle Investments.
Cualquiera que sea el resultado de las elecciones el 8 de junio, la trayectoria de la libra para Luke Newman, cogestor de la estrategia UK Absolute Return de Henderson, parece muy incierta, por eso el gestor aconseja esperar a ver qué oportunidades pueden surgir en adelante.
“En los próximos meses podrían surgir oportunidades para vender o tomar posiciones cortas en las empresas que se han beneficiado de la reciente fortaleza de la divisa. Sin embargo, también vale la pena recordar que aproximadamente dos tercios de los ingresos de la compañía FTSE 100 provienen de fuera del Reino Unido. Cualquier retroceso en la libra esterlina puede ser positivo para algunas cotizadas de Reino Unido”.
Favorable a las mid-caps
Por su parte, Neil Hermon y Indriatti van Hien, también de Henderson, creen que estas elecciones anticipadas son positivas para la renta variable de Reino Unido, especialmente para las mid-caps.
“Si el Partido conservador de Theresa May consiguen aumentar su mayoría en las elecciones generales del 8 de junio, esto daría un impulso a los mercados de renta variable de Reino Unido y a la confianza de los consumidores. El gobierno británico estaría en una posición más fuerte para negociar los términos de Brexit y el gobierno de May tendría un mandato definitivo para el proceso de desconexión con la UE, aunque uno podría cuestionar el beneficio real de una mayor mayoría de un partido fracturado”, explican.
Pero si hay algo que garantiza la noticia de hoy, estima Steven Andrew, gestor del fondo M&G Income Allocation, es que la política del Reino Unido sigue siendo una fuente de incertidumbre para los inversores, ya de por sí ocupados tratando de digerir un menú completo de riesgo político este año, que abarca desde la primera vuelta de las elecciones francesas de este domingo a los temores de un posible conflicto con Corea del Norte.