El presidente de Banco Sabadell, Josep Oliu, pronunció ayer su ya tradicional conferencia anual en la Cámara de Comercio de Sabadell, en la que analizó las perspectivas económicas para el nuevo año. Ante un numeroso grupo de empresarios y directivos, Oliu empezó su intervención haciendo un repaso a lo más significativo, a nivel macroeconómico, del pasado año. En este sentido, destacó el mayor dinamismo registrado por la economía de Estados Unidos frente a la europea, así como las diferentes políticas monetarias seguidas por la FED y el BCE. “Estas diferencias de momentum”, dice, “tendrán una gran importancia durante el 2015, un año complicado en el que aún no queda claro cuál va a ser la palanca para un crecimiento global sostenible.”
También se refirió, entre otros factores, al proceso de integración bancaria europeo, a la disminución en los ritmos de crecimiento de los países emergentes y, muy especialmente, a la caída del precio del petróleo. En este sentido, manifestó que “todavía es pronto para saber con detalle cómo afectará esta caída a la economía mundial durante 2015, dependerá de si los precios se mantienen bajos durante meses o se produce un repunte en pocas semanas”.
Respecto a sus previsiones de cara al 2015, Oliu asegura que seguirán los problemas por la baja inflación y que muchos países emergentes deberán empezar a reducir, de forma notable, los niveles de endeudamiento de los últimos años. Vaticina que durante 2015 seguirán siendo especialmente relevantes las políticas de apoyo monetario y prevé un crecimiento del PIB del 1% en la zona euro (el 2,3% en España), del 2,7% en Estados Unidos y del 6,8% en China.
Centrándose ya en las perspectivas económicas para España durante los próximos doce meses, las previsiones son que durante 2015 se mantenga el proceso de recuperación de nuestra economía. “Un proceso de recuperación que tiene unas bases sólidas, gracias a las reformas estructurales puestas en marcha, así como al buen comportamiento de las empresas exportadoras, que seguirá siendo clave en el futuro inmediato. Se dan ya las bases para crear empleo. No hay otro país en Europa con unas perspectivas tan buenas como España”.
En este mismo sentido, Josep Oliu afirmó que “en 2015, mejorarán los flujos de crédito por las condiciones más benignas y porque el miedo a asumir mayor riesgo se está superando. España destacará en positivo en Europa, pese a las dificultades y a la inestabilidad del actual escenario político, que sería muy deseable que se superase cuanto antes, mediante el diálogo. Esta incertidumbre generará volatilidad en el mercado, pero el sustrato económico del país es sólido.”
El presidente de Banco Sabadell finalizó su intervención exponiendo a los asistentes las características del plan estratégico Triple 2014-2016 de Banco Sabadell, que tiene como objetivo consolidar unos márgenes adecuados y triplicar el beneficio durante estos tres años, al focalizarse en la rentabilidad, la transformación del modelo de producción y el balance, y en el asentamiento de unas bases sólidas para la internacionalización de la entidad.