Tras la remontada de última hora de Jean-Luc Mélenchon en las encuestas de cara a la primera vuelta de las elecciones en Francia, los mercados se han puesto más nerviosos, si cabe. Los riesgos están aumentando y todavía escuece la complacencia vivida en torno al Brexit o la llegada Donald Trump a la Casa Blanca.
Por si fuera poco, el atentado islamista sufrido ayer en París refuerza los argumentos euroescépticos y en contra de la inmigración que el Frente Nacional que lidera Marine Le Pen lleva esgrimiendo toda la campaña desde Niza hasta Lille, y desde Nantes a Metz.
Los analistas coinciden: la probabilidad de que Le Pen se convierta la vigesimoquinta presidenta de la República Francesa son escasas, pero hay que mantener la cautela y buscar métodos para reducir la magnitud de un eventual impacto negativo en las carteras, conservando al mismo tiempo una asignación de activos correctamente expuesta.
“La respuesta depende claramente del tipo de cartera, pero pensamos que es necesaria esa protección. En efecto, considerando los altos niveles de los mercados y la poca consideración, en general, de este riesgo político, el nivel de riesgo nos parece hoy asimétrico en detrimento del inversor”, explica en su análisis La Française.
“Hoy en día los mercados no nos remuneran lo suficiente como para ignorar esta posibilidad”,añaden los expertos de la gestora gala.
Candidatos en el margen de error
Conforme se acerca la cita, este domingo 23 de abril, la situación se está volviendo más tensa y sigue habiendo una gran incertidumbre. Las encuestas del fin de semana muestran a los cuatro candidatos principales dentro del margen de error estándar de cada uno y las gestoras intuyen el riesgo. “Cuanto menor sea la participación, mayores serán las posibilidades de Le Pen de ganar”, recuerda Oddo Meriten AM.
Tras lo vivido en el último año, ¿quién se fía ahora de las encuestas?
“La mayor preocupación para los inversores es la insinuación de que cerca de un 30% del electorado puede no acudir a votar. Esto aumentaría las opciones de una segunda vuelta Le Pen frente a Mélenchon. A los mercados no les gustaría que esto ocurriera. Si ocurre, podemos esperar una venta masiva de bonos del gobierno francés, una caída del euro y otra ronda de preguntas sobre la estabilidad de Europa”, advierte Patrick O’Donnell, gestor en Aberdeen Asset Management.
Por su parte, Nick Peters, portfolio manager de Fidelity, reconoce también que en los últimos 6 meses ha tratado de diversificar las exposiciones de su cartera de forma más general, aunque sigue siendo optimista sobre la renta variable europea en los fondos que gestiona, el FF Global Multi Asset Tactical Defensive Fund y del FF Global Multi Asset Tactical Moderate Fund.
“He elevado mi exposición al oro, además de introducir una nueva posición larga en el yen japonés, una moneda que suele actuar como refugio», afirma.
Fidelity sigue creyendo que el resultado más probable es un enfrentamiento en segunda vuelta entre Le Pen y Emmanuel Macron, un candidato más centrista. Este resultado sería positivo para los mercados, de tal modo que el euro subiría y el diferencial entre la deuda francesa y alemana se estrecharía. “Hasta ahora los bonos del estado francés se han llevado la peor parte del nerviosismo”, recuerda.
Movimientos defensivos
Y es que incluso aunque Le Pen no consiga sacar el máximo partido a su impulso electoral, Franklin Templeton prevé que el populismo seguirá predominando en el discurso político europeo en los próximos años.
“A largo plazo, una victoria de Macron podría resultar negativa para los mercados de renta fija de Francia, dado que actualmente sus políticas son confusas y no parecen abordar las dos principales preocupaciones económicas del país: los altos niveles de ratio de deuda/producto interior bruto (PIB) y de déficit por cuenta corriente”, apunta David Zahn, director de Renta Fija Europea de Franklin Templeton Fixed Income Group.
Zahn no duda tampoco de la reacción negativa inmediata de los mercados en caso de que Le Pen ganara la segunda vuelta de las elecciones.
En la misma línea defensiva ha ido el análisis de Unigestión. “Creemos que la victoria de uno de los candidatos populistas, o incluso unas encuestas más ajustadas de lo esperado, podría provocar una recogida de beneficios generalizada o un posicionamiento más defensivo por parte de los inversores. Para nosotros, el equilibrio entre el riesgo probable y el retorno ha cambiado desfavorablemente. Como resultado, estamos actuando para protegernos contra el riesgo de una gran sorpresa durante las elecciones presidenciales francesas”, explican Florian Ielpo, responsable de macroeconomía del equipo de análisis, y Guilhem Savry, gestor del equipo de multiactivos.
Primas de riesgo al alza
Es precisamente ese sentimiento anti-europeísta que se está asentando en el Viejo Continente el que preocupa también a Philippe Ithurbide, responsable global de estrategia y análisis de Amundi AM.
En este contexto, dice, “parece lelegítimo que las primas de riesgo (spreads frente a Alemania, volatilidad, CDS …) permanezcan en un nivel alto hasta que veamos más claramente el resultado”. Ithurbide recuerda, sin embargo, que mientras los votos de Brexit y las elecciones americanas tuvieron lugar en una sola ronda, las elecciones francesas se llevan a cabo en dos, y es probable en Francia, “el juego de alianzas y transferencias de votos marque la diferencia”.
Otra gestora en reducir tácticamente sus posiciones en renta variable ha sido Edmond de Rothschild AM. “Tememos que los mercados –demasiado entusiastas– estén tomando poco en consideración los riesgos políticos. En el transcurso de los próximos meses, la anticipación y la compra de coberturas va a ser cada vez más importante para los inversores”, afirma François Raynaud, gestor de fondos de Asignación de Activos y Deuda Soberana de la firma.
Para Emmanuel Kragen, gestor de Cross Asset de La Financière de l’Echiquier, la prima de riesgo político debería seguir contaminado los mercados incluso después de la primera ronda. Sin embargo, la firma estima que el riesgo es exagerado.
“No esperamos que Marine Le Pen gane, y debido al sistema electoral, no podrá reunir una mayoría parlamentaria para implementar su programa (incluyendo el referéndum de la UE). Por tanto, habrá un rally de alivio en los mercados de renta variable después de las elecciones”, vaticina.
Luca Paolini, estratega jefe de Pictet AM, recuerda también que las acciones europeas, en parte eclipsadas por el riesgo político ofrecen mejor valor relativo que las de Estados Unidos. “Los inversores subestiman el riesgo de que Le Pen gane, pero un buen resultado del Frente Nacional en la primera ronda puede sacudir los mercados”, dice.